Raid on Rommel
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No me gusta mandarlos ya
a la boca del lobo,

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pero son mejores de lo que pensaba y,
en fin, decidiremos sobre la marcha.

:35:08
Cállate.
:35:11
¡Silencio! ¿Sabes lo que es silencio?
- Silencio...

:35:16
¿Qué pasa con la chica?
- Creo que va a causarnos problemas.

:35:18
Es imprevisible, señor.
- Tiene razón.

:35:22
Si nos delata ante los nazis,
estamos perdidos.

:35:25
Algo se podrá hacer.
:35:27
Una pena que usted no ayude. - ¿Cómo?
- Se la podría camelar muy fácilmente.

:35:32
Se supone que entiende de mujeres.
- No de ese tipo de mujeres.

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Me imagino muy bien a sus pacientes.
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Con apelar a sus emociones no basta.
Pero se la podrá comprar. - Seguro.

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Con los prisioneros he cedido.
Espero que no fuera un error.

:35:50
En cuanto a la chica...
- Déjeme intentarlo de nuevo.

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Tenemos poco tiempo.
- Ningún tiempo, capitán.

:35:57
¡Dios mío... alto!
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¡Bajad!
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¡Dos divisiones acorazadas completas!
¿Qué diablos hacen aquí?

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No importa... Mis hombres están
dispuestos. ¡Ataquemos!

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Por la izquierda se va a Derna.
Para Tobruk es todo recto.

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Quédandonos aquí vamos a levantar
sospechas. - Sí...

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¿Quién más habla alemán? - Garth.
- Dígale que se ponga detrás.

:36:33
Usted venga conmigo.
:36:54
¿Quiere que me ocupe de ella?
- No, su nombre está en los papeles.

:36:58
Dijo que yo me hacía responsable.
Se me ha ocurrido algo.


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