:10:00
Se valen mucho
de los sueños.
:10:06
- Algo te preocupa.
- Nada le preocupa a Pete el cubano.
:10:09
- Algo te preocupa.
- No sé porqué.
:10:11
Total, sólo levantarme
de la cama ya me cuesta 200 dólares.
:10:13
- ¿200 al día?
- Eso dice mi contable...
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en conjunto, 200 diarios,
entre impuestos, seguros...
:10:20
los coches, el jardinero,
el que limpia la piscina...
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y los que podan los árboles,
por el amor de Dios.
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Luego están Carmela, los pagos
de la hipoteca, el colegio suizo...
:10:32
Doscientos dólares al día.
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Y en la fábrica, ésa es otra.
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Hay que financiar la nueva
colección y escasea el dinero.
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Hay que pagar la maquinaria,
y también las nóminas.
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Y puede que nos auditen.
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- ¿Que os auditen, porqué?
- El año pasado...
:10:56
hicimos algunos apaños
en los libros de cuentas.
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- ¿Y qué dice Phil?
- Está preocupado.
:11:03
Siempre está preocupado.
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Cuando vuelvas
de Nueva York...
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¿porqué no vamos a Ginebra
a ver a nuestra hija?
:11:14
Harry, ella está mejor allí.
Europa es más tranquila.
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Aquí le puede pasar de todo.
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El otro día, al salir
un hombre de un restaurante...
:11:24
llegó otro y le mató a tiros.
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Ni siquiera se conocían.
Pasó a unas manzanas de aquí.
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Una patrulla de camboyanos
podría vigilar Beverly Hills.
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Las asistentas mejicanas
podrían cocinarles el arroz.
:11:36
- Está mejor en Suiza.
- Echo de menos a mi niña.
:11:44
Aquella canción de Babar...
:11:46
"La canción del elefante".
:11:49
¡Harry, se inyectan caballo
en los lavabos del instituto!
:11:56
La hija de Pete el Cubano
no se inyecta caballo.