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...quejamás hayan pisado suelo inglés.
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Estos son los hechos de este caso.
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El inspector Dixon, un agente
condecorado, de larga experiencia...
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...intervino, en base a
informaciones fidedignas...
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...y a un buen trabajo policial,
deteniendo a Paul Hill.
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Quien sintiéndose culpable y
avergonzado de su crimen, confesó.
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Esa confesión llevó a la policía
hasta el cabecilla Conlon...
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...y su familia terrorista.
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Su tía, Annie Maguire,
experta fabricante de bombas...
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...se ponía sus guantes
para manejar los explosivos...
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...en la cocina de
su casa, en Harlesden.
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Permitía incluso que sus hijos
manejaran explosivos.
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Vincent, de 16 años y Patrick, de 14.
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El cual no sabía, es decir,
no podía saber, lo que estaba mal.
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Giuseppe Conlon, su cuñado...
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...era el mensajero que
llegó con más explosivos.
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Armstrong y su compañera Richardson
fueron los que colocaron la bomba.
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Éstas son las personas que,
en medio del pánico...
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...tuvieron que deshacerse
de la nitroglicerina.
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Y eso es lo que selló su destino.
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¿Cómo lo sabemos? Porque
la verdad estaba en sus manos.
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Es una historia escrita con
la sangre de sus víctimas.
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Han visto a algunos de
los que sobrevivieron...
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...a su cruel falta de respeto
por la vida humana.
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Ahora su deber...
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...proteger a la sociedad
de estos criminales.
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Y confio en que lo hagan.