:05:11
¡Despertad! ¡Ladrones!
:05:13
¡Mirad por vuestra hacienda
y vuestra hija!
:05:17
¡Levantaos, señor Brabancio!
:05:20
-¡Despertad!
-¡Señor!
:05:21
¡Ladrones! Mirad
por vuestra hacienda y vuestra hija.
:05:25
¡Ladrones! ¡Ladrones!
:05:28
¿Qué motivo hay para tal estruendo?
:05:31
¿Qué sucede?
:05:38
Señor...
:05:39
...¿vuestra familia
se halla toda en casa?
:05:42
Rodrigo, te conozco.
:05:45
Te he dicho que no quiero
que rondes más mi casa.
:05:48
Francamente oíste de mis labios...
:05:51
...que mi hija no es para ti.
:05:53
¿Están cerradas vuestras puertas?
:05:56
¿Por qué lo preguntáis?
:05:59
Ahora mismo...
:06:02
...un lascivo morueco viejo y negro
fuerza a vuestra blanca oveja.
:06:06
¿Qué quieres, grosero maldiciente?
:06:08
Quiero anunciar...
:06:10
...que vuestra hija y el moro
hacen la bestia de doble espalda.
:06:13
Eres un pillo.
:06:15
Y vos sois un senador.
:06:18
La pagarás, Rodrigo.
:06:21
Señor...
:06:22
...como gustéis.
:06:24
Mas por favor, averiguadlo:
:06:28
Si estuviere en su cuarto
o en la casa...
:06:31
...castíguenme las leyes del Estado
por vil engañador.
:06:38
¡Prended la yesca!
:06:40
¡Dadme una vela!
¡Despertad a todos!
:06:45
Se parece a mi sueño
esta desgracia.
:06:49
Me mata ya a recelos la sospecha.
:06:52
Luz, digo...
:06:54
...luz.
:06:57
¡Traigan armas acá!