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El Papa León X,
obispo soberano de Roma.
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Sucesor de San Pedro y el líder
de la Iglesia Católica Romana.
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Yo ansío por alguien
que salve la cristiandad.
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Vamos a rezar para que
esa persona llegue.
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Su reputación lo
precede Alejandro.
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Entonces yo temo.
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Cardenal Cayetano,
tú eres un brillante...
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estudiante y tienes un
fervoroso deseo de servir.
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Yo necesito de personas así.
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Su excelencia.
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Albert de Brandenburg
quiere ser arzobispo de Mainz.
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Él ya es arzobispo...
¿¡de dos territorios alemanes!?
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Correcto.
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Entonces la ley canónica lo
descalifica de tener un tercero.
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Pero... ¿no era menor de edad
cuando le dieron su primer puesto?
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Sí, así es.
Así como yo.
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Sin duda, Cayetano no debió informarle
que yo fui Cardenal con 13 años de edad.
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La ambición de Albert todavía
puede servir a la gloria de Dios.
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Impuestos en las puerta de Viena.
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Perturbándome.
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La propia ciudad de Roma se convirtió
en una cloaca a cielo abierto.
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Llena de perros y
gatos salvajes de día...
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y asesinos y fornicadores
por la noche.
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Y esa nueva Basílica de San Pedro.
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No es solamente
un edificio, Alejandro.
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Es un símbolo de mi deseo de
restaurar la iglesia de Cristo.
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Y Alberto podría ser una
pequeña bendición en eso.
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Él me ofreció 10 mil
ducados por Mainz.
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Pero Alberto está quebrado.
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Tú estás bien informado.
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Los Fuggers le
harán un préstamo.
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¿Los banqueros imperiales?
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Un préstamo.