Reap the Wild Wind
anterior.
reproducción.
marcadores.
siguiente.

1:30:01
¡es el hombre que lo planeó!
1:30:05
Caballeros...
1:30:09
hay mil maneras para que los
conspiradores puedan beneficiarse...

1:30:12
de hundir sus propios barcos.
1:30:15
Y ahí parado está un abogado
de Charleston que las conoce todas.

1:30:21
¡Engañó a su empresa aseguradora!
1:30:23
Los engañó a ustedes...
1:30:25
mientras esperaba en el Bajío de
Satanás por el cargamento hundido.

1:30:30
¡El cargamento no ha sido tocado!
1:30:32
Sólo porque nadie bucearía por él.
1:30:35
Ese barco apenas cuelga
del arrecife.

1:30:39
Exijo una respuesta.
1:30:41
¿Por qué estaba Stephen Tolliver
en ese arrecife?

1:30:43
Sr. Tolliver, ¿responderá?
1:30:46
No.
1:30:48
Por supuesto que no.
1:30:50
No puede.
1:30:54
Por favor, Juez Marvin.
1:30:57
Yo puedo decirle por qué el Sr.
Tolliver no responderá esa pregunta.

1:31:03
La Srta. Claiborne no puede
testificar a menos que la llamen.

1:31:06
Sr. Tolliver, ¿desea que
la Srta. Claiborne sea su testigo?

1:31:12
No.
1:31:14
Pero acusa a Steve
por algo que no hizo.

1:31:17
Su Señoría, no se ganaría nada
con su declaración.

1:31:23
Llamo a la Srta. Claiborne...
1:31:25
como testigo para el tribunal.
1:31:32
El Claiborne no llegó a La Habana
porque yo lo impedí.

1:31:35
- ¿Ud. Io impidió?
- Partí las drizas con un hacha.

1:31:40
¿Por qué?
1:31:45
Porque tenía fe en Jack Stuart.
1:31:50
¿El Sr. Tolliver no le dijo que
Stuart hundiría el Southern Cross?

1:31:54
Sí.
1:31:56
La Srta. Claiborne tenía
todas las razones para no creerme.


anterior.
siguiente.