:23:01
Henri Verdoux,
comerciante de muebles.
:23:03
Balong y Cía.
llevamos una hora buscándole.
:23:06
El mercado se ha hundido,
necesitamos 50.000 francos.
:23:09
- ¿Cuándo?
- Mañana, cuando abra el mercado.
:23:13
¿Dónde voy a encontrar
50.000 francos ahora?
:23:16
Si no, está perdido.
:23:18
Veré lo que puedo hacer.
:23:21
¡Vaya, vaya!
:23:24
¡Vaya, vaya, vaya!
:23:28
Lydia,
en la ciudad de Corbeil.
:23:33
Veamos, en Corbeil
los bancos cierran a las cuatro.
:23:38
C, C, C.
:23:46
Corbeil.
:23:47
Si cojo el de las 2 h 15,
llegaré a las 3 h 30.
:23:50
Tengo media hora.
:24:00
Los bancos cierran a las cuatro...
:24:05
¡Lydia!
:24:08
Pensaba que estabas en Indochina.
:24:11
- Lo estaba, querida, lo estaba.
- No me llames ''querida''.
:24:17
No he me has escrito
ni una línea en tres meses.
:24:20
¿No has recibido mis cartas?
Te escribía casi todos los días.
:24:23
Sólo recibí un telegrama
hace tres meses.
:24:26
¡Abandonarme así!
:24:28
Tengo que viajar por negocios,
soy un ingeniero.
:24:31
Es una pena
que no lo supiera antes.
:24:34
Lydia.
:24:36
Bien, ¿qué quieres?
:24:40
- Nada, querida.
- ¡Qué raro!
:24:43
Pensé que te alegraría verme,
eso es todo.
:24:47
¿Eso es todo?
:24:48
Sólo te veo cuando quieres algo.
:24:51
Lydia, me niego a pelearme contigo,
es demasiado desagradable.
:24:57
La vida puede degenerar fácilmente
en algo sórdido y vulgar.