:22:06
- ¿Volverá un día a su país?
- Eso espero.
:22:11
- ¿Para luchar?
- Por supuesto.
:22:13
- Para expulsar a los austríacos.
- ¿Sí?
:22:18
Justo ahora, cuando Ilegaba...
:22:20
montado en su caballo
y con Ilamas detrás...
:22:23
he recordado "El Orlando Furioso",
¿lo ha leído?
:22:28
En Italia, lo leemos en la escuela.
:22:35
¿Se acuerda de cuando Orlando
está enfadado?
:22:37
- Arranca robles.
- Eso es en los libros.
:22:41
Yo me paso la vida leyendo.
Para mí, es un consuelo.
:22:46
El Sr. Chambon quiere que inculque
a los niños el amor por los libros.
:22:50
Voy con ellos a todas partes.
:22:58
Camille, Edmond...
:23:01
Despertaos, es Manosque.
:23:06
- ¿Adónde van?
- Volvemos a casa.
:23:09
No, no pueden pasar.
Nadie puede entrar.
:23:23
- ¿Cuánto tiempo debemos quedarnos?
- Tres o cuatro días.
:23:26
- Justo para ver que estáis sanos.
- Venid.
:23:30
Lo siento, todo es por mi culpa.
Sino, ya estaría usted lejos.
:23:34
Será mejor que me quede.
:23:35
- ¿Seguro que nadie tiene hambre?
- No.
:23:39
Si cambiáis de opinión,
Ilamadme y os traeré comida.
:23:41
- ¿Qué puede ofrecernos?
- Lo que quiera.
:23:43
- ¿Pollo asado?
- ¿Por qué no?
:23:45
De acuerdo, dos pollos asados,
una botella de vino tinto...
:23:47
una hogaza, queso y veinte puros,
de los buenos.
:23:50
Aquí hay unas reglas, no aceptamos
nada que venga de fuera.
:23:54
- Salvo los huevos duros.
- Quiero pollo y los niños, también.
:23:57
- Sí.
- Me opongo a que los pollos entren.