Into the Arms of Strangers: Stories of the Kindertransport
anterior.
reproducción.
marcadores.
siguiente.

:41:04
El guardia de la frontera nazi...
:41:07
pasó revista de forma oficial...
:41:09
e hizo que algunos niños
abrieran sus maletas.

:41:12
Nos gritaban...
:41:14
y dejaban cIaro quién mandaba aIIí.
:41:16
Buscaban cosas nuevas
que tuviera Ia gente.

:41:19
Los niños tenían ropa y cosas nuevas.
No Ies gustaba.

:41:23
A Ios niños Ies hicieron pasar un maI rato.
:41:26
No hacían más que llorar.
:41:29
Estuvimos allí bastante rato.
:41:30
Se tomaron su tiempo
y disfrutaban haciendo Io que nos hacían.

:41:57
Luego, de repente, IIegamos a HoIanda.
:42:01
Todo eI mundo gritaba animosamente:
:42:03
" ¡Esos maIditos nazis!
¡Deberían morirse! ¡Ahora somos Iibres! "

:42:13
Había alaridos, chillidos,
gritos y canciones.

:42:17
Fue la mejor fiesta a la que he ido jamás,
:42:20
aunque realmente no comprendía
lo que pasaba.

:42:23
Cogí a una chica mayor que yo
por Ia cintura y eIIa a mí.

:42:27
Se sabían Ias canciones que cantaban.
:42:30
Seguramente eran canciones sionistas,
:42:33
pero yo también Ias cantaba
porque era muy divertido...

:42:36
formar parte de la fiesta.
:42:39
Los guardas fronterizos del lado holandés
no fueron los únicos amables.

:42:45
Tenían un contingente...
:42:47
de mujeres que nos trajeron cacao...
:42:49
y pan holandés.
:42:52
Era como maná caído deI cieIo.
:42:54
Fue maraviIIoso.
:42:56
De repente te sentías
como si hubieras estado envueIta...


anterior.
siguiente.