:58:07
	Buenos días, señora.
:58:08
	Asumo queha venido apedirme...
:58:10
	que tenga clemencia con su marido.
:58:13
	¿De veras?
:58:14
	Espero de todo corazón, doctor...
:58:17
	que permanezca encerrado para siempre
y que cuando por fin...
:58:20
	fallezca en las entrañas frías y húmedas
de su institución...
:58:23
	lo dejen como carroña
para los roedores y los gusanos.
:58:28
	Me doy por corregido, señora.
:58:30
	Si no puede curarlo...
:58:33
	curarlo de verdad...
:58:36
	le suplico que al menos...
:58:38
	dome a la furiosa bestia
que controla su alma.
:58:43
	Eso no es algo fácil, señora.
:58:47
	Sabrá, supongo...
:58:48
	que cuesta mucho dinero tener
a su marido internado en Charenton.
:58:52
	Pago su estipendio todos los meses,
con más diligencia de lo que debería.
:58:56
	Eso apenas cubre los gastos
de su habitación...
:58:59
	apenas queda nada
para los tratamientos apropiados.
:59:03
	Opiatos para sofocar su furia.
:59:07
	Arneses para castigarlo
cuando se porta mal.
:59:11
	Quizá si pudiera reforzar sus súplicas
con los medios para satisfacerlas--
:59:15
	No soy una mujer rica.
:59:18
	Recibe una pensión, ¿no es así?
:59:20
	- ¿De la venta de sus libros?
- Es dinero empañado, doctor.
:59:26
	- Qué idea más maravillosa, Marquesa.
- ¿Cuál?
:59:29
	Que el dinero mal habido,
procedente de su degeneración...
:59:34
	podría ahora lograr su salvación.
:59:38
	Está más allá de la perversión...
:59:41
	que el honor tenga precio.
:59:46
	Imagínese.
:59:48
	Viejos amigos dignándose
a besar su mano de nuevo.
:59:57
	Vaya, Marquesa...
:59:58
	qué placer verla de nuevo.