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El Dr. Joshua Ngaba,
Ministerio de Salud de Kenia.
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Sir Bernard Pellegrin, director
de la FCO de la sección de África.
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Permítame darle los saludos
afectuosos de Su Majestad.
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Pensé que Arnold iría hacia el interior.
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Irá. No te preocupes.
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No me llevará. Ya le pregunté.
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- Qué bien. Tessa.
- ¿Sí?
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Me alegraría si te mantuvieras
alejada de Kibera...
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al menos hasta que el bebé nazca.
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Ya verás cuando vuelva a ser soltera.
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- Hola, Tim. ¿Cómo estás?
- Hola, Tess.
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¿Hoy estás batallando sin Maude?
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Tuvo una de sus jaquecas.
Las mías las soporto de pie.
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- Qué viril eres.
- ¿ Verdad?
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Hola, Arnold. Hola, Ghita, encanto.
Qué hermoso sari.
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Qué invitados tan interesantes,
Sr. Donohue.
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Estamos en Kenia, Dr. Bluhm.
Lo justo es invitar a alguien autóctono.
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- ¿Fue el turno del Ministro de Salud?
- Eso parece.
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¿Con quién está hablando?
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No tengo idea.
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- Pensé que tus espías lo sabían todo.
- Sólo Dios lo sabe todo.
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Trabaja para la Mossad.
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Conociste al Dr. Ngaba, ¿verdad?
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Sí, en la inauguración
de una clínica de vanguardia...
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sin autoclaves para esterilizar.
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Seguro las convirtió en un Mercedes.
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Nunca había conocido a un alquimista.
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Tessa, encanto.
:28:54
- Ah, Tessa.
- Hola, Porter.
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Le presento a Tessa Quayle, Dr. Ngaba.