:59:00
La encontré sobre mi mesa
cuando volvimos de cenar.
:59:05
Es un indicio excelente, monsieur.
Debe volver a abrir la Ópera.
:59:09
- Pero dijo...
- Es una contraorden. Ábrala.
:59:12
- ¿Con MIle. DuBois?
- Claro. Tranquilizará a ese loco.
:59:16
Si no le hace daño a nadie,
no importa que esté en el edificio.
:59:19
- Christine DuBois no debe cantar.
- ¿Cómo?
:59:22
Y el asesino no debe
permanecer en el edificio.
:59:25
- Es mi deber capturarlo.
- No Io entiendo.
:59:28
Si Christine DuBois canta, complacerá
al asesino, y quizá no aparezca nunca.
:59:32
Para que se deje ver,
debe cantar otra persona.
:59:35
¿Sugiere que abramos la Ópera con
un asesino como atracción adicional?
:59:40
- Por favor, Lecours...
- Habrá policías por doquier.
:59:43
Con el coro, en el escenario
y protegiendo a la cantante.
:59:46
- Pero nuestra reputación...
- Yo también soy reacio, monsieur.
:59:50
Sobre todo por MIle. DuBois,
pero no veo otra alternativa.
:59:53
¿ Y a quién propone
como "cebo", inspector?
:59:58
A quien decida usted.
1:00:00
Mme. Lorenzi.
Tiene coraje, esa mujer.
1:00:02
- Demasiado.
- Perfecto.
1:00:04
- La Ópera reabrirá.
- Sí, monsieur.
1:00:32
Buenos días, Christine.
1:00:34
- Buenos días.
- ¿Me permites, Christine?
1:00:36
Sí, adelante.
1:00:50
- ¿ Y bien?
- Christine, yo...
1:00:52
- ¿Sí?
- ¿Podría hablar contigo...?
1:00:54
- ¿Qué ocurre?
- Usted primero.
1:00:56
- Christine, yo...
- De uno en uno, por favor.